La solidaridad en acción y a pulmón, por que los chicos no solo se encuentran con alimentos, si no que “Merendero A Pulmón” se convirtió en un verdadero “oxígeno” para los del barrio. Ir allí significa salir, por algunas horas, de la realidad de sus casas.
MERENDERO A PULMÓN.
Delia, junto a un grupo de madres, hacen que los chicos no dejen de comer.
Un ejemplo de vida y amor que viven día a día los más chicos del barrio.
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