Gobernar, gestionar, ¿cambiar?

Por  Silvano Pintos

Lo sucedido en la asamblea del CEDEMS este fin de semana, refleja las diferencias internas que mantienen muchos gremios en la provincia, en donde la dirigencia que los representa, parece no mantener la misma sintonía de los afiliados, quienes en este caso ya mantenían una postura díscola con las negociaciones salariales que se llevaban a cabo con el gobierno local: con representantes que terminaron aceptando lo propuesto oficialmente ante el rechazo de los afiliados, algunos de los cuales ya están anunciado una posible ruptura dentro del seno de una agrupación gremial que en otras épocas tenía una fuerte presencia en la comunidad, pero que la realidad muestra dicotomías insalvables que la hacen posicionarse en desventaja con relación a futuras negociaciones. Convertir $ 200 a no remunerativo y bonificable, $ 110 de material didáctico y 130% de antigüedad para los docentes que tienen más de 26 años de servicios no resultó suficiente, ni siquiera se acercó a las aspiraciones que buscaban más beneficios que los logrados, abriendo una brecha desfavorable, teniendo en cuenta que de acuerdo a lo observado el pasado sábado, la actual dirigencia está lejos del necesario  apoyo interno para lograr un acuerdo puertas adentro.

Mientras tanto, el resto de los gremios docentes buscan un consenso unificado en materia de propuestas salariales, dejando librado a las reuniones zonales las decisiones que se tomen sobre los ofrecimientos que se les acerca desde los ámbitos oficiales y no llegar a conflictos internos que terminan minando posiciones futuras con paritarias que todavía no se cerraron del todo.

Lo que sucede con los gremios, en líneas generales, es llamativo. La convocatoria que se realizó el pasado martes y que terminó con un camarógrafo herido al explotarle una bomba de estruendo en medio de la multitud, es solo una muestra de lo difícil que es controlar a su propia gente, y esto es un síntoma de la falta de credibilidad que muchos gremialistas tienen en su propio entorno. En este lamentable hecho parece que nadie fue, nadie vio nada, pero la agresión existió y sirvió para que se desviará la atención del eje central que era una masiva manifestación en contra la política actual que en materia económica afecta a gran parte de la población y que en Jujuy tuvo una contundente convocatoria contra el actual gobierno por primera vez; y es algo que no se puede minimizar.

Con una semana álgida para la actual administración, por el aluvión que sucedió en la zona de Tilcara, el Gobernador recorrió personalmente todos los lugares afectados,  donde los fenómenos naturales dañaron de manera importante un amplio sector de dicha localidad. Se reunió con el Comité de Emergencia que esta vez se trasladó hacia el lugar, impartió directivas sobre la ayuda que deben recibir los damnificados. Escucho personalmente a los vecinos que sufrieron por este fenómeno, no esquivó el bulto a las críticas que motivó la escasa ayuda que se había recibido hasta el momento. En la reunión que se llevó a cabo con posterioridad con los responsables de la emergencia en el lugar, pidió celeridad para con los damnificados, con una respuesta contundente para mitigar en parte el daño que sufrió la población del lugar.

En la apertura del año judicial, adelantó la construcción de la ciudad judicial y señaló como importante el avance que se realiza en la reforma del sistema judicial, reconociendo las limitaciones con las que se trabaja y de la cual se busca brindar soluciones. Todo esto en un día y gestionando permanentemente.


Pero, las dudas sobre el trabajo en algunos ministerios rondan permanentemente en un momento en donde varios funcionarios no supieron estar a la altura de las circunstancias, como lo señaló el primer mandatario. Obviamente que esto se debe entender como inminentes cambios en algunas áreas, algo que se veía venir hace rato.

Las decisiones que se adopten pueden traerle dificultades políticas adicionales. Es por todos conocidos que muchos ministros no pudieron o no supieron asentarse de acuerdo a las necesidades. Algunos de los cuales, están representados por integrantes de la coalición que lo llevó al poder. ¿Qué puede pasar si el recambio viene por ese lado, es decir por gente que no es del riñón radical? ¿Puede traerles problemas políticos a futuro?  Son cuestiones que también están en la mesa del debate puertas adentro, y en un año en donde necesita mantener esta coalición lo más unida posible y dentro de las posibilidades electorales que se avecinan.

No es un tema menor, ni mucho menos. La coyuntura política puede demorar estas decisiones, pero no por mucho tiempo, para poder rearmar y encarar un primer semestre con dificultades propias y otras que son de arrastre por el contexto nacional.

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