La zona de La Almona es una de las más importantes en este momento para la Dirección Provincial de Bosques. Ahí hay una gran cantidad de bosque nativo que se va deteriorando por obras privadas. En los distintos casos se indican las medidas técnicas que hacen falta para realizar la obra de manera segura, en otros casos más graves se dispone la paralización de la obra.
Virginia Outon, directora de Bosques, explicó que en esa zona el suelo tiene una cobertura vegetal de entre el 60 y 70 por ciento, y que eso “no es un bosque en estado óptimo pero representa una buena cobertura; la idea es incrementar la protección existente y que aumente la calidad del bosque".
Desde la Dirección se intensificaron los controles porque hay contrucciones que no respetan los términos de cuidado del bosque. Cuando se detectan situaciones irregulares algunas de las medidas que se llevan a cabo son “el pircado, la disminución de la pendiente y una serie de medidas técnicas que implican que el agua no corra tan rápido y no ponga en peligro a otras personas que estén aguas abajo”, explicó la funcionaria. Hay que recordar que una de las principales funciones de la vegetación es la de frenar el avance del agua y de esa manera disminuir el impacto negativo de las lluvias y la posibilidad de inundaciones.
Las zonas más complicadas por estas situaciones irregulares son en los alrededores de la ciudad de San Salvador por el crecimiento demográfico. La funcionaria no disponía en el momento en que se realizó la entrevista de los datos concretos de cantidad de lotes, casas y terrenos en conflicto con la ley, con correcciones realizadas o que se hayan paralizado las obras.
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