Ara Pyau.. 

 21 de septiembre: año nuevo guaraní

Hoy, 21 de septiembre, no solo es la llegada de la primavera, sino el año nuevo guaraní, donde despiden todo lo viejo y se predisponen a lo nuevo.

Este 21 de septiembre es el día de la primavera, el estudiante pero también el Ara Pyau, año nuevo guaraní, donde comunidades indígenas en San Pedro festejaron este día de agradecimiento y preparación.

En dialogo con Virginia y Víctor, miembros de la comunidad guaraní de Jujuy, comentaron el momento en familia que celebraron en el día de hoy, donde no se lleva conteo de años, sino tiempo bueno y tiempo malo.

“El año nuevo inicia con los primeros frutos de los árboles, el renacer de las plantas y como ellos deben cambiar nosotros también debemos dar nuevos frutos” explicaba Víctor Hugo Flores a todojujuy.

“Venimos de una civilización ancestral y nos encanta ser lo que somos” comentaba Víctor, feliz de poder compartir esta celebración de la mano de sus familiares.

“A nosotros nos gusta trabajar la tierra, vivir así en el campo (…) algunas personas no nos entienden, nos juzgan, por eso es importante que se conozca”, agregaba Víctor.

ARA PYAU (Tiempo nuevo guaraní)

Año nuevo guaraní

Para los Guaraníes, el año se divide en dos grandes ciclos o estaciones: ARA PYAU y ARA YMA. El primero es el Año nuevo y el segundo el Año viejo o Año de antes. El tiempo del ARA PYAU transcurre desde que se retiran las heladas, a fines de agosto o septiembre y todo se cubre de neblina (TATACHINA) porque es el tiempo de JAKAIRA, y dura hasta fines de febrero o marzo. La primavera coincide con el inicio de un tiempo nuevo, el ARA PYAU. Es el momento en que todo empieza a florecer y comienzan las celebraciones. Un período de profunda espiritualidad.

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Septiembre es tiempo del Ara Pyau: el año nuevo Guaraní

Septiembre es tiempo del Ara Pyau: el año nuevo Guaraní

El ARA PYAU contiene dos tipos de acciones, que narran así en lengua mbya:

IPYAUPAA JUMA OPAMBA’E:

-MA’T’Ã

-ÑEMONGARAIA

Es un tiempo en el que se bendicen las semillas, las ramas, las primeras frutas del monte; cuando se va al OPY (Templo) para agradecer por todo lo que tienen ese año para sembrar y plantar, y además para bendecir a los niños y las niñas en un ritual que consiste en la asignación de sus Nombres Verdaderos, sus Mbya (TERY HETE). Tiempo fuerte y profundo de conexión con el Creador, de espiritualidad que marca la vida de los y las mbya.

Es un tiempo para recordar que todos los seres humanos tenemos que tratarnos con profundo respeto: No sólo entre familia sino con los demás. A todo lo que exista en la tierra, a todo lo que vemos, a todo lo que se mueva, a todo lo que hay en el monte debemos tratarlo con profundo respeto.

VÍCTOR HUGO FLORES – Comunidad Guaraní TJ

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