Su pasión nació en el seno familiar. Hija de un camionero pionero que trajo uno de los primeros camiones a Jujuy para abastecer el mercado local, Luciana creció admirando esa vida rutera. "Me siento orgullosa de mi familia", afirma con seguridad. Su madre, inicialmente preocupada por los riesgos de la ruta y de "no saber si papá volvía a casa", terminó respaldándola.
El detonante fue un ACV de su padre en 2021: "Ahí empecé a incursionar en el camión. ¿Por qué no podría manejarlo yo?", se preguntó.
Orgullosa, recuerda su primera vez: "El camión 112 de mi papá, cuando me recibí de contadora, fui y lo manejé". A pesar de requerir fuerza en los cambios, sostiene que "para una mujer también es posible".
papá de Luciana Ayala - camionera
Rompiendo prejuicios: más mujeres al volante
En Jujuy, las camioneras son escasas debido a los prejuicios. Ante algunos comentarios como 'qué mal maneja esa mujer', Luciana debate: "Somos más cuidadosas". Citando estadísticas dice que solo el 1,2% de las licencias nacionales son para mujeres y que en la actualidad las empresas del interior empezaron a incorporarlas por su cuidado en el mantenimiento, el interior del vehículo y la seguridad vial.
Este año, una convocatoria de una empresa nacional cambió todo. "De 1300 mujeres, quedé seleccionada", cuenta. Pasó por tests psicológicos, psico-físicos (donde era la única entre varones que la miraban raro) y capacitaciones para categoría E1, manejando camiones chasis acoplados o semirremolques. "Hay que animarse, se trata de tácticas que vas aprendiendo", aconseja.
Una chofer de colectivo la inspiró: "Mi papá se subió, la felicitó y dijo 'manejás muy bien'. Avanzar es romper paradigmas", manifestó.
Luciana Ayala
El empoderamiento en la cabina: tecnología y un mensaje inspirador
Luciana ya sabe enganchar y desenganchar remolques, un momento que la hizo sentir "empoderada": "Puedo hacerlo, no me para nadie". Aunque su profesión de contadora le gusta, "esto lo amo. Mi niño interior brilló al ver a mi papá y ahora lo hago yo".
Los tiempos cambiaron, cuenta la joven camionera: "No tuve malas experiencias. Hay una nueva generación y es diferente en los tratos. Solo una anécdota la sorprendió: un hombre le sacó una foto manejando el camión de su papá.
camioneras
Volviendo un poco a tiempo atrás, Luciana hace referencia a que antes los camiones eran distintos, la mecánica, lo hidráulico, cambió mucho la tecnología y "eso también nos permite poder estar acá a nosotras", dijo.
Su reflexión final es contundente: "Conducir da independencia. Nuestros límites son de la cabeza. Te pueden mirar mal, pero si no va contra la ley, ¿por qué no intentarlo?". Por último hace un pedido a las empresas de más capacitaciones para mujeres: "Es una buena salida laboral con buenos ingresos y estaría genial que se presenten más".
- NOTA LUCIANA AYALA - CONTADORA Y CAMIONERA POR VOCACIÓN