El riesgo país se desplomó al nivel más bajo en nueve meses
Ahora se prepara para perforar los 600 puntos. El alza de los bonos hizo caer más de 450 puntos el índice de JP Morgan, que ahora marca 621 puntos básicos.
El riesgo país cayó al nivel más bajo en nueve meses.
El riesgo país de Argentina descendió a 621 puntos básicos, acercándose nuevamente a la marca de los 600 y alcanzando su nivel más bajo en diez meses. Esta mejora estuvo impulsada por la recuperación de los bonos soberanos luego del triunfo del gobierno de Javier Milei en las elecciones de medio término.
La caída refleja una percepción más favorable de los inversores sobre la estabilidad política y económica, en un contexto donde aumentan las expectativas de acceder a financiamiento externo.
El riesgo país cayó al nivel más bajo en nueve meses y se prepara para perforar la línea de los 600 puntos.
Recuperación del riesgo país tras las elecciones
Los bonos públicos del país continuaron con su tendencia positiva el miércoles, registrando subas de hasta 3,5% en el GD46D. El desempeño destacado de los títulos volvió a generar una baja en el indicador de JP Morgan, que retrocedió 34 puntos, quedando a 61 unidades del mínimo histórico registrado durante la gestión de Milei, cuando tocó 560 puntos básicos en enero de 2025.
El riesgo país es un indicador que mide la probabilidad de que un Estado no pueda cumplir con sus obligaciones financieras frente a acreedores internacionales. Refleja la percepción de riesgo para quienes destinan capital a ese mercado y se calcula comparando la diferencia entre el rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, considerados sin riesgo, y los bonos soberanos emitidos por Argentina.
El rally de los títulos públicos impulsó un desplome de más de 450 unidades del indicador de JP Morgan.
Según distintos analistas, este índice debería mantenerse por debajo de los 500 puntos básicos de manera constante para que Argentina recupere la posibilidad de acceder a financiamiento externo con tasas competitivas, un canal que quedó prácticamente cerrado desde principios de 2018 durante la gestión de Mauricio Macri.
La realidad muestra que la confianza de los inversores cambió tras el triunfo del oficialismo en las elecciones y la previsión de mayor estabilidad política en el Congreso, abriendo expectativas sobre posibles reformas económicas y nuevas oportunidades de crédito internacional.
La intervención del Tesoro de Estados Unidos en el mercado cambiario argentino, por un monto cercano a los USD 2.100 millones antes de las elecciones legislativas, junto con la propuesta de un acuerdo de swap por USD 20.000 millones, ayudó a moderar la volatilidad y a reducir la percepción de riesgo.
El riesgo país argentino retrocedió a 621 puntos básicos.
JP Morgan sobre el acceso a mercados internacionales
En relación con la baja del indicador de riesgo país, un análisis de JP Morgan señaló que “la pronunciada disminución de las primas de riesgo ha acercado a Argentina a los mercados internacionales, y un plan de recompra de deuda podría intensificar la reducción de spreads y respaldar los esfuerzos de estabilización económica”.
El informe también resaltó que, si se concreta con éxito el respaldo financiero de USD 20.000 millones gestionado por el gobierno libertario junto a bancos internacionales y organismos multilaterales, y se ejecuta un programa de recompra de bonos, la caída de los diferenciales y la apertura a financiamiento externo podrían generar un escenario de mayor estabilidad económica para el país.
Javier Milei junto a Jamie Dimon, CEO de JP Morgan.
La recuperación en los precios de los bonos provocó una caída de más de 450 puntos en el índice de riesgo país, que antes de las elecciones se ubicaba en 1.081 unidades. Este comportamiento genera expectativas positivas tanto en el Gobierno como en los mercados financieros sobre la posibilidad de que Argentina vuelva a acceder a financiamiento externo en 2026.
Para la administración, la situación no es menor, ya que en enero debe afrontar vencimientos con acreedores internacionales por USD 4.000 millones, y otros USD 4.400 millones se presentan en julio. Aunque el presidente y el ministro de Economía, Luis Caputo, señalaron que los pagos podrían cubrirse con el swap gestionado por Estados Unidos, una baja del riesgo país hacia la franja de 300 a 400 puntos básicos abriría la posibilidad de refinanciar esas obligaciones sin necesidad de desembolsar efectivo a los bonistas.
El riesgo país es un índice que expresa la probabilidad de que un país no cumpla con sus compromisos de pago ante acreedores internacionales.
Expectativas del Gobierno y viajes a Estados Unidos
Según los especialistas de Cohen, la baja reciente en la prima de riesgo de Argentina “allana el camino para que más empresas y provincias se beneficien de la apertura financiera y acerca al Tesoro a los mercados de capitales, aunque deberá presentar un plan para revertir la caída de las reservas internacionales y eliminar definitivamente los controles cambiarios que aún persisten para las empresas”.
Por su parte, durante la tarde del miércoles, Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, viajaron a Estados Unidos para mantener encuentros con inversores globales. La misión internacional busca consolidar el interés de los fondos extranjeros, mientras en el mercado doméstico se sigue de cerca el alcance y la efectividad de las reformas económicas proyectadas.
Los títulos públicos argentinos extendieron su racha positiva el miércoles.
Desempeño futuro y particularidades del mercado bursátil
El desempeño próximo de los activos financieros argentinos estará condicionado tanto por el avance de las negociaciones en el Congreso como por los resultados de las gestiones que el Ejecutivo lleva adelante en el ámbito internacional.
Durante la tarde del miércoles, Milei y Caputo, partieron rumbo a Estados Unidos para mantener reuniones con inversores globales.
La evolución del mercado seguirá determinada por los movimientos del Tesoro y del Banco Central, mientras los inversores recalibran sus estrategias ante el nuevo contexto político y económico.
Por otro lado, la actividad bursátil de este jueves presentará particularidades debido al feriado por el Día del Bancario, que suspende la operativa financiera habitual. Según informó BYMA, se permitirán operaciones de negociación, pero no se efectuarán liquidaciones de valores durante la sesión.