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SUSCRIBITELa gran parte de los consumidores experimentarán reducciones en los descuentos aplicados al costo de la energía que abonan en sus cuentas.
Aumenta el gas.
Las boletas finales además aumentarán el mes que viene 1,5% y 1,6% promedio, respectivamente.
En las últimas horas se informó la reducción de los subsidios en febrero en las tarifas de electricidad y gas natural para aproximadamente 9,5 millones de viviendas de sectores de ingresos medios y bajos. Estos usuarios recibirán un descuento menor en el costo de la energía para esos servicios públicos.
Además, las facturas experimentarán un incremento promedio de 1,5% y 1,6%, respectivamente, el mes próximo. Las decisiones fueron formalizadas mediante resoluciones publicadas en el Boletín Oficial por la Secretaría de Energía en las primeras horas de hoy. Estas acciones son parte del plan del ministro de Economía, Luis Caputo, para intensificar la reducción de subsidios y asegurar el balance fiscal, al mismo tiempo que busca lograr una inflación inferior al 2% mensual.
El apoyo estatal implica que los usuarios reciban un descuento sobre el costo total de la electricidad y/o el gas, según el sistema de segmentación actual: los hogares de altos ingresos (Nivel 1) abonan el “precio real”, mientras que los de ingresos bajos (N2) y medios (N3) obtienen un subsidio. A partir de ahora, el descuento será del 65% para los N2 y del 50% para los N3 en ambos servicios, lo que significa una reducción considerable en el subsidio.
Desde junio pasado, las bonificaciones para la electricidad eran del 71,2% en el caso de los N2 y del 55,94% en el de los N3. Para el gas natural, los descuentos eran del 64% (con una cobertura ligeramente mayor en un punto porcentual) y del 55%, respectivamente.
De acuerdo con los registros del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), hasta diciembre, había 9,5 millones de usuarios de electricidad en los segmentos N2 (6,3 millones) y N3 (3,2 millones) que recibían subsidios, de un total de 16,2 millones de usuarios. Esto representa una reducción de aproximadamente 800.000 beneficiarios. En cuanto al gas, hay alrededor de 5,3 millones de usuarios con subsidios de un total de 9,5 millones de hogares, siendo 3,1 millones del segmento N2 y 2,2 millones del N3.
Desde junio, los usuarios del N2 cuentan con un subsidio que cubre su consumo hasta un límite de 350 kilovatios hora (kWh) por mes, mientras que los N3 tienen una bonificación hasta 250 kWh mensuales. El consumo adicional a esos valores se paga a tarifa completa. El Ministerio de Energía está evaluando la posibilidad de reducir esos límites en los próximos meses.
Bajo la dirección de María Tettamanti, la Secretaría de Energía también está desarrollando un nuevo modelo de subsidios que se implementará a partir de mediados de 2025. El objetivo es establecer un sistema con solo dos categorías de usuarios, similar a la tarifa social aplicada durante el gobierno de Mauricio Macri: aquellos que reciben subsidios y aquellos que no.
El Presupuesto para 2025 contempla una reducción en los subsidios por un monto superior a los 3.000 millones de dólares, una cifra comparable con la reducción que se realizó este año. Recientemente, el FMI solicitó, entre otras medidas, mejorar la equidad en la disminución de los subsidios.
El Ejecutivo busca acelerar la reducción de la inflación en 2025, con miras a los comicios legislativos. Por este motivo, durante el verano se autorizarán incrementos en los costos de la electricidad y el gas natural por debajo del 2% mensual. En enero, los aumentos fueron del 1,6% en electricidad y del 1,8% en gas. Para febrero, se espera un ajuste de 1,5% y 1,6%, respectivamente. Además, se implementará una disminución en el ajuste mensual del dólar oficial, pasando de un 2% a un 1%.
En febrero, el área de Energía iniciará la actualización de tarifas con las empresas distribuidoras y transportistas. Este proceso generará nuevos esquemas tarifarios, así como las inversiones que las compañías deberán realizar para optimizar el servicio en los próximos cinco años. A partir de abril, se implementarán las nuevas tarifas, las cuales implicarán incrementos en las facturas que no superarán el 10%, y se contempla la posibilidad de fraccionar esos aumentos en pagos mensuales, según informaron fuentes oficiales.
La intención es establecer un mecanismo de ajuste mensual automático que permita que las tarifas y, por ende, los ingresos de las empresas, se mantengan estables en términos reales. Este enfoque marca una diferencia significativa frente a los incrementos puntuales implementados desde 2024, luego de años de congelamientos, con el objetivo de apoyar la disminución de la inflación.
“Además, en línea con el objetivo de simplificar procesos y desburocratizar al Estado, se decidió cambiar el mecanismo de compensación sobre el precio derivado de la aplicación del régimen de Tarifa Social de gas natural. Ahora, el pago de compensaciones se hará directamente hacia los productores y no a las distribuidoras. De esta manera, quitamos intermediarios y agilizamos la cadena de pagos”, agregó Energía.
Asimismo, las autoridades señalaron que las indemnizaciones que recibirán las empresas proveedoras y distribuidoras, como parte del programa de subsidios, se implementarán de forma retroactiva, de acuerdo con el sistema de compensación definido en el Decreto N° 892/20.
“Los montos a compensar se descontarán de las sumas a abonar por las prestadoras del servicio de gas a sus proveedores y serán compensadas directamente a estos últimos a través de esta Secretaría”, aclararon desde la Secretaría de Energía.
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