En la Aduana encontraron una calavera en una encomienda postal

Allí dentro, los agentes encontraron el cráneo humano en una bolsa de nylon, incumpliendo con el régimen de courier y sin las pertinentes autorizaciones del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

Además, en la caja se encontraba una factura por 295 dólares y hojas con un texto en inglés que se titulaba, traducido al español: “Guía para la importación de restos humanos a los Estados Unidos para entierro o subsiguiente cremación”.

Hallazgo

Los agentes aduaneros avisaron a la Justicia sobre lo que vieron a través del escáner.

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Asimismo, dado que la calavera podría ser un resto de valor arqueológico, convocaron al Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano para su peritaje.

Qué pasó con la calavera

Más allá de que se obviaran o no las reglamentaciones para ingresar un elemento de esta naturaleza en losEstados Unidos, se dejaron de lado las de la Argentina para este tipo de traslados. En primer lugar, al ser restos humanos, no corresponde el envío mediante una encomienda postal y, además, toda exportación de restos óseos debe estar, al menos, avalado por Senasa.

Con todos estos incumplimientos, los agentes procedieron al secuestro del bulto y se comunicó tanto a la fiscalía como al juzgado actuante lo ocurrido. De la misma manera, teniendo en cuenta que el cráneo podría tener algún tipo de valor arqueológico, se convocó al Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano, para que este realizara los peritajes pertinentes.

Por lo tanto, los inspectores aduaneros procedieron al secuestro del envío postal, dieron comunicación formal a la fiscalía de turno y elevaron su informe al juzgado actuante.