Junior – River y una previa con incidentes

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River llegó al estadio en buenas condiciones pero cuando fueron a realizar la entrada en calor, la policía que estaba fuera del estadio custodiando a estos manifestantes, tiró gases lacrimógenos haciendo que los futbolistas abandonen el campo de juego ya que los ojos fueron perjudicados. La televisación mostró como Marcelo Gallardo sufría y se tapaba los ojos.

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Jaime Pumarejo, alcalde de Barranquilla, en la previa había declarado que el partido se iba a jugar sin problemas e indicó que “ninguno de los sectores que se manifiesta va a interferir en el partido. Un grupo de jóvenes quiere hacer un 'plantón', que significa que se quieren juntar cerca del estadio para manifestar que no están de acuerdo con que se juegue un partido de fútbol en este momento. Tenemos varias anillos de seguridad y miembros de fuerzas públicas para que puedan manifestarse pero que haya fútbol”.

El partido se jugó aunque las detonaciones y los graves disturbios no cesaron. Es más, a los 23 minutos del primer tiempo, el árbitro del partido, Esteban Ostojich tuvo que parar el encuentro debido a que los jugadores se vieron afectados por los gases.