El evento buscó recordar por qué se celebra la jornada, quiénes fueron los protagonistas y cómo se dio aquel proceso que terminó el 18 de noviembre de 1834 con la proclamación formal de la autonomía.
La autonomía política de Jujuy
El 18 de noviembre ocupa un lugar central en el calendario jujeño. Ese día, en 1834, la provincia se separó de Salta y pasó a integrarse como entidad autónoma dentro de la Confederación Argentina. La jornada tiene un peso simbólico fuerte porque marca el cierre de un reclamo que ya llevaba décadas.
La idea de una autonomía propia no nació en 1834. Desde 1811 y 1816, delegados jujeños enviaron pedidos formales para obtener reconocimiento como provincia. Aquellos documentos buscaban crear una identidad institucional y dejar atrás la dependencia administrativa de Salta. A pesar del impulso inicial, esos intentos no tuvieron éxito y el reclamo quedó pendiente.
Ese estancamiento mantuvo viva la discusión política durante casi dos décadas. Las tensiones crecieron en distintos momentos y abrieron un camino que terminaría con uno de los enfrentamientos más recordados en la historia regional.
Acto por la autonomía política de Jujuy.
Acto por la autonomía política de Jujuy.
La Batalla de Castañares y el giro decisivo
El 18 de noviembre de 1834 fue un día clave. Las tropas jujeñas, lideradas por el teniente coronel José María Fascio, ganaron la Batalla de Castañares frente a las fuerzas salteñas. Ese triunfo impulsó el avance definitivo del proceso autonómico, ya que dio respaldo militar y político a la postura jujeña.
Ese mismo día, autoridades locales realizaron un cabildo abierto en la casa municipal. Allí se redactó el acta que estableció la autonomía política de Jujuy. Fascio asumió como gobernador interino mientras se organizaba la nueva estructura política. La decisión recibió la ratificación de la Legislatura de Salta el 2 de diciembre de 1834, lo que cerró el proceso formal y confirmó la creación de la provincia.